Alegría en las casas de los “pequeños monstruos”. Los fans de Lady Gaga han visto de nuevo reinar a la “madre monstruo” en los MTV Video Music Awards este domingo, llevándose cinco premios (entre ellos el de mejor canción y el de mejor artista), en reconocimiento al éxito de su regreso a la pista de baile con Chromatica. El personaje había crecido tanto que llegó a sofocar a la persona, así que Stefani Germanotta (Nueva York, 34 años) decidió explorar otros territorios menos extravagantes con su álbum de duetos con Tony Bennett (2014), su personal viaje interior con Joanne (2016) y su entrada triunfal en el cine con Nace una estrella (2018). Pero con Chromatica, publicado esta primavera, vuelve a los derroteros de sueños y fantasías desde los que se abrió un privilegiado hueco en el firmamento del pop hace 10 años.
Como todo en este 2020, la de este domingo ha sido una edición extraña de los MTV Video Music Awards, esa especie de Super Bowl de la música juvenil, a la que el coronavirus despojó del calor del público en directo. En lugar de un auditorio abarrotado, los artistas actuaron sin público desde diversas localizaciones de Nueva York para respetar el distanciamiento social.
Pero el coronavirus también permitió al público contemplar un delirante abanico de posibilidades estéticas que puede ofrecer una prenda como la mascarilla, cuando es Lady Gaga la que la lleva: mostró al menos cuatro diferentes, plateadas, rosas, con cuernos como de jabalí, con pantallas de leds. Incluso cantaron con máscaras, ella y Ariana Grande, su éxito Rain On Me, que se llevó los premios de canción del año y mejor colaboración. “Llevad máscara, es un signo de respeto”, dijo Gaga al final, tras recoger el premio Tricon, nuevo de esta edición, que reconoce a un artista por sus méritos en tres o más disciplinas.
La noche empezó con un homenaje a un superhéroe. Así calificó la presentadora de la gala virtual, la actriz Keke Palmer, a Chadwick Boseman, el actor protagonista de Black Panther, fallecido el pasado viernes. La primera actuación de la noche fue del canadiense The Weeknd, que interpretó su éxito Blinding Lights. Al final de la gala, se llevaría el codiciado premio al mejor vídeo, y al recogerlo pidió justicia para Jacob Blake y para Breonna Taylor, dos de las últimas víctimas que han encendido las protestas por la violencia policial contra ciudadanos afroamericanos en Estados Unidos.
Otra de las actuaciones más esperadas era la de la boy band surcoreana BTS, que acabó llevándose el premio en la categoría de pop. Actuaban por primera vez en una gala de los Video Music Awards, y lo hicieron con Dynamite, su primer single en inglés, que tras su lanzamiento el pasado 21 de agosto rompió el récord de más visionados en YouTube en las primeras 24 horas (más de 101 millones).
Miley Cyrus ofreció el guiño nostálgico de la noche, al cantar Midnight Sky subida a una gran bola de espejos, recordando sus contoneos sobre una bola de derribo en el rompedor vídeo de Wrecking Ball que desterró para siempre su imagen de niña Disney.
The Weeknd y BTS volvieron a ganar en las categorías de r&b y K-Pop, respectivamente. Otros premiados fueron Doja Cat (mejor nuevo artista), Maluma y J Balvin (latina), Megan Thee Stallion (hip hop), Coldplay (rock), Machine Gun Kelly (alternativo), H.E.R. (vídeo por una buena causa) y Taylor Swift, que ganó el premio a la mejor dirección por su debut detrás de la cámara. Este año, además, había premios a la mejor actuación en cuarentena y el mejor vídeo desde casa, que ganaron, respectivamente, los latinos CNCO y, de nuevo, Lady Gaga y Ariana Grande.
Fuente: elpais.com.do